La Balona no termina de arrancar y pierde frente al Córdoba B
- Los albinegros vuelven a perdonar sus ocasiones y sufren su segunda derrota seguida de la temporada.
- El árbitro anuló un gol a los balonos por un fuera de juego que muchos no vieron.
- David Sánchez: «Nadie esperaba este inicio, sobre todo yo».

La Real Balompédica Linense regresó sin puntos de su enfrentamiento contra el Córdoba B, en su primer desplazamiento de la temporada, correspondiente a la segunda jornada en el grupo X de la Tercera Federación. La Balona cayó derrotada por 2-0 en un partido muy parecido al que brindó en el Ciudad de La Línea frente al Chiclana CF, sumando dominio durante los principios de cada una de las partes pero sin goles. En la segunda mitad, protagonizó más tiempo de juego, aunque sin sacar el provecho esperado y que todos desean, unas veces por la falta de acierto en los remates, y otras por la indecisión de algunos de sus jugadores para rematar o disparar a la puerta contraria. Puede quejarse de un gol anulado muy dudoso, pero en el cómputo general no estuvo acertado el equipo de David Sánchez
La Balona salió al campo de la Ciudad Deportiva del Córdoba con la ambición para conseguir los primeros puntos en su casillero. Se impuso en el juego durante los quince minutos iniciales, un dominio generado desde Lanzini y Moyano, que imponían su personalidad en la creación y en la recuperación desde el centro del campo, y con Cascajo acechando la puerta cordobesista. El equipo albinegro presionaba en zona alta, pero sin generar grandes ocasiones.
El Córdoba B demostró calidad en la salida de balón y en la defensa. El dominio inicial de los de David Sánchez se fue diluyendo como un azucarillo conforme avanzaron los minutos. La presión sin ocasiones de la Balona, sin disparos a puerta, dio paso al dominio de los locales, que lo ejercieron durante todo el resto de la primera mitad del partido. Ese juego del Córdoba B, con un inmenso Peregrina, su capitán, se fue transformando en peligro sobre la portería defendida por Hermosín.
El quiero y no puedo de la Balona, de la misma forma que ocurrió hace una semana en el Ciudad de La Línea, era el anuncio de lo que llegó, de forma fatídica, en el minuto 34. Viti, desde fuera del área, disparó a puerta y batió a Hermosín, rematando una jugada precedida hasta por dos toques de otros tantos compañeros, ante la infructuosa defensa albinegra. Ocurrió a poco de reanudarse el partido tras la pausa por hidratación. La temperatura en Córdoba fue de 29 grados, un calor que afectó a los dos equipos por igual y que no debía servir de excusas.
El primer disparo a puerta de la Balona llegó en el minuto 42 y fue obra de Pepe, que disparó con potencia aunque su balón salió un metro y medio desviado de la puerta del filial del Córdoba. La mejor ocasión llegó en los minutos de descuento, antes del pitido para el descanso. Zaki chutó a puerta, tras pase de Cascajo, pero el portero Arévalo desvió la pelota en una buena intervención.
A remar en contra
Los albinegros salieron en la segunda parte tal como empezaron el partido, con decisión de ir a hacerse con el encuentro, ya con el viento en contra por el gol marcado en la primera mitad por Viti. David Sánchez dejó en la caseta a Sergio Pérez y dio oportunidad a Alvarito, hombre por hombre en punta de lanza. Cascajo fue quien siguió llevando la mayor sensación de peligro al área cordobesista, pero no pasaban de eso, de ser una sensación hasta que llegaron a ser algo más, en la cabeza de Julio Algar o en las botas de Pepe y Zaki.
David Sánchez, como ya hizo en la segunda mitad del primer partido contra el Chiclana, refrescó el mediocampo y la delantera, dando entrada progresivamente a Boateng, un jugador que no termina de encontrar su mejor versión, a Diego Domínguez, que destacó entre sus compañeros en una nueva tarde de sufrimiento y decepción, y a Adrián, en lugar de Cascajo, que no tuvo mucho tiempo para demostrar lo que puede aportar. Rubén Olea volvió a ser recambio de Chey, que abandonó el terreno de juego con molestias en sus gemelos.
El partido pudo cambiar para bien de la Balona, pero el árbitro decidió anular un gol marcado por los albinegros por un fuera de juego que casi solo vio su asistente. El público que estaba en línea con el balón, tanto seguidores de la Balona como del Córdoba B, no vieron lo mismo. El tanto no subió al marcador. Si acertó el árbitro cuando sacó la tarjeta amarilla a Zaki por intentar simular un penalti que fue inexistente.
Los minutos siguieron pasando hasta que Pablo, de un chutazo, batió a Hermosín, adelantado. Un golazo que cerró el partido ya en tiempo de descuento. No quedó tiempo para mucho más, y la Balona tendrá que revisar sus errores para revertir un pésimo comienzo liguero. La próxima oportunidad, de nuevo en el Ciudad de La Línea, contra el Ceuta B el domingo 21 de septiembre a las 19:00.
